Las personas que llevan tiempo en ventas han comprobado que no todos sus clientes se comportan de la misma manera. No son todos iguales. A lo largo de los años han aprendido a diferenciar bien unos tipos de clientes de otros, y han logrado adaptar rápidamente su propio comportamiento en función de la categoría o tipo de cliente que tuviesen delante.
Para poder hacer esta adaptación al tipo de cliente es necesario que conozcas qué tipos de clientes hay, con una descripción concreta de qué hace cada tipo de cliente. ¿Cómo se comporta?
Después de este primer paso, cobra vital importancia saber unas pautas concretas para actuar con cada tipo de cliente, sabiendo que con esa forma de actuar vas a obtener dos cosas:
1. La máxima satisfacción del cliente
2. El máximo beneficio
Puedes obtener más ventas y una gran satisfacción si tienes a tus clientes bien categorizados
Si ambas cosas son importantes para ti en tu negocio, tarde o temprano acabarás conociendo cada tipo de cliente que tienes en él. Y la experiencia te dará pautas concretas para enfrentarte a cada categoría obteniendo resultados. La experiencia es el factor más relevante para conseguir ésta y otras habilidades para seducir al cliente.
La formación comercial lo que te genera es una mayor rapidez a la hora de conseguir resultados. Lo que te puede enseñar tu experiencia laboral en el transcurso de 5 años puedes aprenderlo eficazmente si te formas en los tipos de clientes que hay y recibes una propuesta específica de qué tienes que hacer con cada uno. Un buen curso online de técnicas de venta puede darte esta ventaja que necesitas en tu negocio.